Está
más que demostrado que el Aprendizaje
Basado en Proyectos (ABP) amplía los conocimientos de los alumnos y desarrolla
sus habilidades para hacer de ellos personas más competentes.
Pero para que esto pueda suceder, es necesario una reflexión muy profunda, que
ayude a definir “qué”
queremos enseñar, “para qué” lo vamos a enseñar y, sobre todo, “cómo” lo
vamos a enseñar.
Es
evidente que seleccionar bien los contenidos a trabajar es clave, pero no
tendría demasiado sentido trabajar los contenidos si no sabemos que es lo que
realmente queremos que los alumnos desarrollen, qué competencias (aprender a
aprender, sentido de la iniciativa, comunicación en diferentes lenguas,
matemática y científica, expresión cultural) o qué habilidades de pensamiento queremos que
consigan a través de esos contenidos.
Llegados
a este punto, muchos nos haríamos la siguiente pregunta: ¿y esto cómo lo hago
yo en mi clase? El
“cómo” es la parte en la que los alumnos deben poner en práctica todo lo que
anteriormente hemos venido diseñando. Hasta ahora se
vienen realizando actividades que solo medían contenido, pero a través de los
desempeños (actividades que conllevan pensamiento), se consigue proponer
escenarios en los que los alumnos son quienes tienen que pensar y poner en
práctica sus conocimientos en contextos diferentes para ir avanzando en su
proceso de aprendizaje.
Cuando
hablamos de desarrollar habilidades de pensamiento, también nos puede invadir
una duda, ¿cómo
puedo saber yo como docente lo que está pensando mi alumno y si está
adquiriendo las habilidades de pensamiento que me he propuesto trabajar? Aquí
sería donde las teorías y herramientas del “Visible Thinking” lideradas
por David Perkins y el "Proyecto Zero" de la universidad de
Harvard cobran su verdadero sentido.
Las rutinas y destrezas de
pensamiento son
desempeños que junto a las fuerzas culturales desarrolladas por Ron Ritcchart,
deben darse en el aula y en las organizaciones, ya que generan una cultura de
pensamiento. De esta manera se
logra que el pensamiento se haga visible y, por lo tanto, contribuye a que los
estudiantes sean conscientes de sus pensamientos (metacognición) y a su vez, se convierte una
herramienta para que los profesores puedan valorar los avances en las
habilidades desarrolladas por sus alumnos.
Y
no solo eso, a la hora de diseñar los desempeños, sería ideal poder hacerlo
teniendo en cuenta las Inteligencias múltiples (H.
Gardner) y
garantizarnos así, que la información que queremos, llegue por diferentes
canales a los alumnos, fomentando sus inteligencias más fuertes y colaborando a
desarrollar las más débiles.
Por
último y refiriéndonos a la evaluación, ya desde el propio término utilizado se
pueden matizar algunas diferencias. Una evaluación consiste en juzgar algo y
calificarlo, la valoración, por el contrario, valora algo y
ofrece retroalimentación y propuestas de mejora, para que
el propio estudiante establezca planes de mejora y de esta manera, sea
consciente de los aspectos en los que debe mejorar y en definitiva, hacer
realidad esa frase tan utilizada que recalca que el alumno debe ser el
protagonista de su propio aprendizaje.
En
este proceso, herramientas como rúbricas para la autovaloración, escaleras de
retroalimentación (alumno-alumno o maestro- alumno) o escalera de metacognición
(habilidades de pensamiento), nos resultan muy útiles, ya que los alumnos tienen
visible los objetivos y comprensiones a conseguir y pueden contrastar sus
logros y establecer planes de mejora.
En
definitiva, al
trabajar por proyectos o tópicos, se consigue llegar al alumno desde la manera
que él aprende y no tanto desde la manera que nosotros enseñamos. También,
nos dan la oportunidad de ofrecerles los contenidos necesarios a través de algo
motivador, participativo, que fomenta el trabajo en equipo y la creatividad y
que, además, ofrece espacios para la reflexión personal, ayudándoles así a
crecer como estudiante y sobretodo, como personas.
¿En
qué consiste esta actividad literaria?
Realizar
recomendaciones literarias no resulta fácil si estamos vinculados a la
docencia. El libro que elijamos, para que otros lean, depende de muchos
factores a tener en cuenta. En nuestro caso, es determinante que atendamos a
los siguientes factores:
-
La edad del niño/a.
-
El progreso de la comprensión lectora de
forma individualizada y en el aula (grupal).
-
El entorno familiar y los conocimientos
previos que posea el alumno.
-
La posibilidad de la existencia de
adaptaciones clásicas.
-
La diversidad de géneros literarios.
-
De lo general a lo particular: autores
de literatura universal, europea, española y extremeña.
-
Métodos de lectoescritura vinculados al
libro escogido en los primeros cursos de Primaria o los últimos cursos de
Infantil.
-
Motivaciones que podamos extraer del
libro y actividades que resulten atractivas vinculadas al mismo: fomento de la
lectura.
-
Lugares para leer el libro: la
biblioteca, la ludoteca, los rincones del aula, la casa.
-
Formatos del libro: Álbumes ilustrados,
libros que contiene materiales manipulativos, poemarios, cancioneros,
antologías…
-
Otras materias que puedan abordarse y
establecer explicaciones adicionales, dependiendo del argumento del libro.
-
Competencias clave que se trabajan, elementos
transversales y resultados de aprendizaje.
¿Cómo
vais a trabajar las recomendaciones literarias?
Localizáis
UN libro que consideréis conveniente
en función de los factores que os he enumerado con anterioridad.
Cuando
decidáis cuál es la obra definitiva que vais a trabajar cada uno, me enviáis un
correo electrónico, un mensaje o me buscáis en la sala de profesores para que
pueda continuar vuestra intervención en el ABP. No queremos que haya
repeticiones y, al ser bastantes alumnos, puede ocurrir que comencéis a
trabajar sobre los mismos. Con el fin de evitar eso, os ponéis en contacto
conmigo y vamos elaborando una lista supervisada, coordinada e ideada como un
fin didáctico común.
Hacéis
una foto de la forma que consideréis atractiva para subirla a nuestro espacio
en Instagram denominado Literadudas. Dicha fotografía ha de
enviarse previamente al correo electrónico con el fin de que sea
supervisada y para repasar el texto que queráis adjuntar, pues el proyecto
fomenta el gusto por la lectura y se convertirá en una guía docente literaria
para todos los que puedan acceder antes del Día del Libro.
Cada
semana tiene que subirse a esta red social al menos una recomendación
literaria, de tal forma que se vea cómo nos organizamos entre todos. El
objetivo es hacer un trabajo entre un equipo de docentes con la finalidad de
que se dé protagonismo a ese bloque temático del Currículo Oficial de Educación
Primaria. En la Educación Literaria
se hace hincapié en un Plan de Lectura, por ese
motivo nosotros trabajaremos por la causa y estableceremos un homenaje
literario hasta la fecha señalada.
El
21 de abril, al coincidir el 23 en festivo, expondremos nuestro ABP en
el Centro Universitario Santa Ana. Es una cita obligatoria e
imprescindible para la asignatura, pues es muy conveniente el
criterio de calificación que aluda a la habilidad lingüística de un docente. La
intervención del alumno será de uno o dos minutos, al finalizar la explicación
sobre en qué consiste nuestro Aprendizaje Basado en Proyectos por parte de la
profesora y acontecerá delante de los cursos de Educación Primaria e Infantil
de la universidad. Aquellos
alumnos que quieran colaborar elaborando más de una recomendación literaria
podrán llevarla a cabo de manera individual o colectiva, aunque han de seguir
los mismos pasos que en la que se exige de forma individualizada (consulta, envío
y publicación bajo supervisión).
Se
establecerán comentarios alusivos a las obras literarias recomendadas. Debéis
interactuar con vuestros compañeros y ayudar en el transcurso positivo o
favorable del proyecto.
¿Qué
conseguiremos con esta actividad?
Los
alumnos de 3º Grado en Educación Infantil y Primaria realizarán una Bibliografía
Recomendada de Literatura Infantil y Juvenil en una red social de uso
educativo.
No
sólo aprenderéis de la experiencia que supone vuestra obra y de la
intervención, pues llevaréis un seguimiento inevitable de las recomendaciones
de otros y sabréis qué libros son ideales en un aula y en la vida cotidiana
para vuestros futuros alumnos. Os relacionaréis con otras personas y conoceréis
su experiencia con la literatura. Sopesaréis vuestro conocimiento previo y el
compartido después de manejar el resultado final. En un futuro, es posible que
le echéis un vistazo más de una vez, recordéis la experiencia y recomendéis los
mismos libros o queráis buscarme para recomendarme otros que habéis conocido.
Una interesante cadena de enseñanza-aprendizaje literaria que puede ser que
nunca termine este curso 2017.